Con un periodo de pretemporada considerado por algunos como demasiado breve, más los compromisos que de orden internacional, debe atender el equipo nacional de baloncesto de los Estados Unidos, los riesgos de una lesión se incrementan exponencialmente.
Este par de semanas recientes con el inicio de la actividad de la NBA, las lesiones parecen haberse cebado sobre varias de las figuras importantes de distintos equipos, tanto en la Conferencia del Este como en el Oeste.
Un listado muy números encabezado por Zion Williamson, que con los Pelicanos de Nueva Orleáns continúa siendo presa de las lastimaduras, mismo destino que el de Jo Morant, quien se lesionó la cadera y no tiene aún un plazo definido para regresar a las duelas.
Kevin Durant volvió a resentirse de la ingle de la pierna derecha y ahora nadie se atreve a asegurar cuándo podrá volver a las canchas y más recientemente Chet Holmgren quien defendiendo la casaca del “Trueno” de Oklahoma, tuvo una fuerte caída y su recuperación se estima para más allá de tres meses